Ingeniero y político sevillano, de familia acomodada, estudió en la Escuela de Ingenieros de Caminos de Madrid. Interesado en las obras públicas, trabajó entre 1901 y 1925 en la construcción de presas hidroeléctricas en el sur de España. Recibió el título de Conde de Guadalhorce en 1921 al inaugurarse el pantano del Chorro. Participó en la vida política, al solicitarle Primo de Rivera como ministro de Fomento (1925-1930). En este cargo creó organismos para descentralizar la planificación de obras públicas, como el Consejo de Energía (1929) o las Confederaciones Hidrográficas (1926). Durante la Segunda República se exilió voluntariamente en Francia y Argentina, país en el que planificó y construyó el metro de Buenos Aires. Varios años después de volver a España en 1948, el general Franco le nombró director de RENFE. El mismo año fue elegido miembro de la Academia de Ciencias Exactas, Física y Naturales, y nombrado presidente Consejo de Obras Públicas.