Islamism is a concept whose meaning has been debated in both public and academic contexts. The term can refer to diverse forms of social and political activism advocating that public and political life should be guided by Islamic principles or more specifically to movements which call for full implementation of sharia (Islamic order or law). It is commonly used interchangeably with the terms political Islam or Islamic fundamentalism. In academic usage, the term Islamism does not specify what vision of Islamic order or sharia are being advocated, or how their advocates intend to bring them about. In Western mass media it tends to refer to groups whose aim is to establish a sharia-based Islamic state, often with implication of violent tactics and human rights violations, and has acquired connotations of political extremism. In the Muslim world, the term has positive connotations among its proponents. Different currents of Islamist thought include advocating a revolutionary strategy of Islamizing society through exercise of state power, and alternately a reformist strategy to re-Islamizing society through grass-roots social and political activism. Islamists may emphasize the implementation of sharia; pan-Islamic political unity, including an Islamic state; or selective removal of non-Muslim, particularly Western military, economic, political, social, or cultural influences in the Muslim world that they believe to be incompatible with Islam. Graham Fuller has argued for a broader notion of Islamism as a form of identity politics, involving support for [Muslim] identity, authenticity, broader regionalism, revivalism, [and] revitalization of the community. Some authors hold the term Islamic activism to be synonymous and preferable to Islamism, and Rached Ghannouchi writes that Islamists prefer to use the term Islamic movement themselves. Central and prominent figures in twentieth-century Islamism include Hasan al-Banna, Sayyid Qutb, Abul Ala Maududi, and Ruhollah Khomeini. Most Islamist thinkers emphasize peaceful political processes, which are supported by the majority of contemporary Islamists. Others, Sayyid Qutb in particular, called for violence, and his followers are generally considered Islamic extremists, although Qutb denounced the killing of innocents.According to Robin Wright, Islamist movements have arguably altered the Middle East more than any trend since the modern states gained independence, redefining politics and even borders. Following the Arab Spring, some Islamist currents became heavily involved in democratic politics, while others spawned the most aggressive and ambitious Islamist militia to date, ISIS.
El islamismo (en árabe: الإسلامية al-ʾislāmiyyah; o también إسلام سياسي ʾIslām siyāsī; lit., \"islam político\") es un conjunto heterogéneo de movimientos políticos cuya ideología y programa político consiste esencialmente en la adaptación de la vida política a los mandatos religiosos del islam. En cambio, según el Diccionario de la lengua española «islamismo» es el «conjunto de dogmas y preceptos morales que constituyen la religión de Mahoma»; mientras que «islamista» es lo «relativo al integrismo musulmán», concepto que califica de «movimiento». En todo caso, no debería confundirse lo \"islámico\" o \"musulmán\" (términos que designan a todo lo relativo al islam) con lo \"islamista\" (lo relativo al islamismo); ni cualquiera de estos términos con el tradicionalismo o el conservadurismo dentro de lo islámico (un \"musulmán tradicionalista\" o \"musulmán conservador\" es el que rechaza las interpretaciones liberales o progresistas del islam o la modernidad -es posible ser musulmán \"tradicional\" o \"conservador\" sin ser islamista, y viceversa, puesto que el uso en ese contexto de los términos \"tradicional\" y \"conservador\" se refiere en principio a las costumbres y cultura islámica tradicionales, además de que el islamismo se presenta a sí mismo como un factor de regeneración, y no de atraso-). Se ha señalado la estigmatización que supone identificar como un todo el islam político con el terrorismo islámico o yihadismo (así como identificar sin más el concepto religioso de la yihad con la violencia política o religiosa -islam y violencia-, a lo árabe con lo islámico y a su civilización como particularmente religiosa o más fanatizadora que otras). En un sentido opuesto, se ha señalado que ignorar la profundidad de lo religioso en el mundo islámico es una manifestación de corrección política. El islamismo tiene una seña de identidad clara que es la adopción de la sharía, del conjunto de normas basadas en el Corán y en las sentencias del profeta, con el objeto de mantener o forjar un orden social regido en su totalidad por el principio de \"ordenar el bien y prohibir el mal\" cuyo contenido marcan los textos sagrados. Fue el programa tradicional de los Hermanos Musulmanes de Egipto, (...) y lo es hoy de los principales movimientos islamistas en el mundo. (...) Partido islámico o simplemente musulmán sería una calificación más ajustada (...) [para los que proponen una] Constitución democrática y (...) el pluralismo político. Antonio Elorza. El islam es religión y es Estado. Heinz Halm El verdadero musulmán afirma que Alá le protege; el islamista considera que es él quien debe proteger a Alá. Sanaa el Aji El espectro político de los movimientos y partidos políticos calificados de \"islamistas\" es muy amplio; aunque es difícilmente comparable con ningún movimiento religioso o político occidental, cuyas denominaciones se le aplican (democracia islámica, socialismo árabe, islamofascismo -este último, de forma muy peyorativa-), abarca desde los que mantienen principios demócratas y moderados, hasta postulados extremistas y radicales. Dentro del islam político, además de las diferencias ideológicas entre la moderación (islamismo moderado) y la radicalidad (islamismo radical: integrismo islámico, fundamentalismo islámico, panislamismo, yihadismo), pueden distinguirse las diferencias entre los movimientos políticos islamistas desarrollados dentro de cada una de las escuelas y ramas del islam (simplificadamente, las dos principales: el sunnismo y el chiísmo): En la rama sunní, el salafismo o wahabismo dio lugar a numerosos grupos, como los Hermanos Musulmanes, Tabligh o el movimiento talibán. Algunas organizaciones violentas afines a esta rama son el Estado Islámico (Daesh), Al Qaeda, Boko Haram, Hamás, Yihad Islámica, Jemaa Islamiya o el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate. En la rama chií, destacan los grupos \"jomeinistas\", liderados por el régimen iraní, como Hezbolá.