Apuntes biográficos/históricosAunque en 1836 el gobierno de la República decretó la fundación de la primera Academia de la Historia, integrada por distinguidos intelectuales, los vaivenes políticos impidieron que prosperara esa iniciativa. En 1888 hubo un nuevo intento y se redactó el proyecto, pero tampoco triunfó. En 1916, apadrinada por redactores y colaboradores de la Revista de Revistas, se fundó la Academia de Historia que, en cierta forma, dio origen a la actual. Su consolidación fue fruto de la casualidad. Uno de sus miembros, don Manuel Romero de Terreros, estaba a punto de partir a España y con tal motivo, la nueva academia le encargó llevar un saludo a la Real de Madrid, con la esperanza de convertirse más tarde en su correspondiente. Su gestión tuvo éxito. La Real Academia de Madrid utilizó para establecerla el reglamento redactado en 1888 para las correspondientes en América y, de acuerdo con éste, el 12 de septiembre de 1919 surgió finalmente la Academia Mexicana de la Historia.